Pústulas en la piel: qué son y cómo tratarlas de forma natural

El cuidado de la piel del rostro (como en el resto del cuerpo) debe abordarse siempre con el objetivo de mantener su mejor estado posible y como prevención frente a posibles problemas cutáneos.

No obstante, cuando surge alguna de estas afecciones, productos naturales como el aloe vera o la arcilla blanca también nos pueden servir, por ejemplo, si padecemos de pústulas en la piel.

¿Qué es una pústula?

Una pústula consiste en una protuberancia de tonalidad roja con el centro blanco o totalmente blanca, que suele presentar dureza y alta sensibilidad cuando se toca.

En la práctica consiste en un tipo de espinilla, algo más notoria porque la piel a su alrededor adquiere un tono rojizo y suele estar inflamada.

Las pústulas en la piel suelen aparecer en la cara, pero también pueden estar presentes en el cuello, en la línea del cabello, por el pecho, debajo del brazo, en la espalda, los hombros y el área púbica.

¿Cuáles son las causas de las pústulas en la piel?

Como toda espinilla, la pústula aparece debido a una obstrucción de los poros. Este bloqueo sí puede ser debido a diferentes causas, como piel muerta acumulada, la aparición de bacterias o incluso restos de productos como algunos tipos de aceite.

El desarrollo de afecciones como acné y foliculitis originan estas pústulas, así como otros problemas en la piel como algunos tipos de psoriasis.

La presencia de pus en las pústulas se explica por la acción defensiva de nuestro organismo. Es una sustancia natural que desarrolla nuestro sistema inmunitario a base sobre todo de glóbulos blancos muertos, que quedan acumulados en la zona al tratar de combatir la suciedad o contra las bacterias presentes.

Tratamiento y remedios naturales para las pústulas en la piel

Los productos naturales como el aloe vera y la arcilla blanca son ideales para combatir las pústulas en la piel.

Te presentamos algunas de las opciones que tienes disponibles en Aloe Plus Lanzarote, con las que podrás cuidar todo lo que necesitas de tu piel, incluso cuando tengas que afrontar problemas cutáneos de este tipo.

Aloe vera para las pústulas o granos infectados

El aloe vera cuenta con un gran porcentaje de vitaminas, minerales y antioxidantes en su composición, así como también elementos antiinflamatorios.

De forma complementaria, el aloe posee propiedades antibacterianas y antifúngicas de gran valor para problemas como pústulas en la piel y otros similares. De hecho, podemos aprovechar de manera general aloe vera para granos infectados de casi cualquier tipo.

Los geles con aloe vera son los productos más recomendados para este cometido. Los tienes en diferentes formatos y con muchos otros ingredientes activos que pueden ofrecerte los mejores resultados en cuanto al cuidado de tu piel.

No olvides también utilizar limpiadores con aloe vera, que te permitirán retirar cualquier resto de impureza, así como también mantener tu rostro hidratado y saludable.

Cuando quieras aprovechar aloe vera para foliculitis, acné, pústulas, granitos infectados y problemas similares, puedes aplicar el gel puro de aloe sobre la piel humedecida y hacer pequeños círculos con una suave presión hasta su absorción o utilizar nuestra pack anti-acné, un tratamiento completo para limpiar la piel a diario y promover la regeneración de los tejidos dañados, ayudando así a prevenir la aparición de futuros granitos. 

Arcilla blanca

Otro producto natural clave en el cuidado de la piel, sobre todo ante problemas como las pústulas en la piel, es la arcilla blanca.

En Aloe Plus Lanzarote tienes el producto idóneo con este ingrediente. Se trata de la mascarilla de aloe vera y arcilla blanca, un aliado en tu cuidado diario, que te ayudará a limpiar los poros en profundidad y a eliminar el exceso de puntos negros, entre otras muchas ventajas.

El aloe vera se encarga de aportar sus propiedades calmantes, hidratantes y de regeneración celular. Por su parte, la arcilla blanca es el complemento clave para eliminar las impurezas de la piel y ayudar en ese trabajo de regeneración celular. Además, la arcilla blanca no reseca la piel, aporta también luminosidad y deja la piel suave y lisa.

Para aprovechar todas estas ventajas, aplica una capa uniforme sobre la piel limpia y deja que actúe durante unos 10/15 minutos. Luego solo tienes que aclarar con suficiente agua tibia para retirar el producto.

Puedes repetir este proceso 1 ó 2 veces por semana, en función del cuidado que necesite tu piel.