El formaldehído es un gas inflamable a temperatura ambiente de olor penetrante y que, en niveles altos, puede llegar a producir desde sensación de ardor en los ojos hasta picor de nariz. También conocido como metanal, el formaldehído se emplea como antiséptico, si bien suele ser uno de los más tóxicos componentes: puede producir dermatitis de contacto, caracterizada por la quemazón, hasta problemas respiratorios si se inhala de forma accidental. Además, el formaldehído suele encontrarse en numerosos productos cosméticos, siendo recomendable desde el principio optar por aquellos productos de carácter más natural a fin de evitar tanto este como otros componentes poco recomendables.
Empresa beneficiaria de una subvención FEDER-REACT UE, destinada a la reactivación económica de las pequeñas y medianas empresas en Canarias como parte de la respuesta de la Unión Europea a la pandemia covid-19, destinada a mejorar la productividad y la competitividad.