El mirtilo, también conocido como arándano, es un fruto con un alto componente de hierro y manganeso, además de poseer ácidos orgánicos y otras propiedades que le confieren un carácter tónico, antidiarreico e hipoglucemiante. Un aliado cada vez más presente en diferentes productos en los que se combina este fruto con citrus y brusco.
El citrus supone el aporte cítrico, además de ser uno de los componentes del mirtilo, mientras el brusco se trata de una planta cuyos frutos posee numerosas propiedades enfocadas a problemas como la circulación sanguínea que engloban las varices, problemas del cabello, gota o incluso hemorroides. Su combinación bajo un complejo hidrosoluble permite una aplicación fácil y eficaz que se beneficia de todas las propiedades de sus ingredientes.