Normalmente se toman infusiones de aloe vera, por las propiedades que pueden aportarnos, aunque también es una bebida recomendable siempre que te apetezca tomarla.
Entre estas propiedades, es un aliado de calidad ante problemas digestivos. Si sufres gases, ardor o hinchazón, la infusión de aloe vera ayuda a normalizar el proceso digestivo y a que te encuentres mejor. De hecho, es recomendable también para personas con colon irritable.
Además, también previene el estreñimiento y ayuda a adelgazar. Esto último lo consigue por otras propiedades complementarias, pero es destacable su efecto saciante. Así que se trata de una bebida natural que nos ayuda a no tener tanta hambre.
Un valor importante de cualquier infusión de aloe vera es que ayuda a eliminar toxinas y depurar el organismo, por eso se dice que "limpia" el cuerpo.
Además, incluso en su formato líquido para beber, el aloe vera cuenta con vitaminas A, B, C y E, así como con magnesio, zinc, calcio, sodio, potasio o hierro, que seguiremos aprovechando.
Las infusiones de aloe vera nos pueden ayudar a reducir los niveles de azúcar en sangre, algo muy importante sobre todo para las personas que padecen diabetes.
Si también queremos prevenir problemas arteriales, esta infusión puede ser muy útil. Controla el colesterol malo y ayuda a incrementar el bueno por las propiedades de la sábila.
Además, mejora la presión arterial, porque ayuda a dilatar los vasos sanguíneos, a reforzar la elasticidad de las arterias y el flujo sanguíneo de oxígeno.
Sus propiedades digestivas ya comentadas, ayudan también a evitar problemas de funcionamiento del colon, de los intestinos y del estómago en general. Por eso muchas dolencias estomacales o digestivas, pueden encontrar en la infusión de aloe la solución que se está buscando. Por ejemplo, también nos ayuda a prevenir úlceras estomacales.
Entre los beneficios adicionales que podemos aprovechar con aloe vera en formato de infusión, se encuentra también un fortalecimiento del sistema inmunológico. Esto se debe a la concentración de vitaminas y antioxidantes que podemos aprovechar de la planta, incluso en formato de infusión.
A nivel general, beber infusiones de aloe vera también nos ayudará a contar con más hidratación, combatir el acné e incluso fortalecer el cabello y su proceso de crecimiento.
La ventaja de tomar el aloe como infusión es que podemos mezclarlo con otros ingredientes, ya sea por su sabor como también por sus propiedades saludables.
Una combinación clásica es la que nos ofrece la infusión de jengibre y aloe vera, muy útil entre otros aspectos, para el tránsito intestinal.
En estos casos, así como por inflamación abdominal, esta infusión puede sernos de gran ayuda. Además, también destaca entre sus propiedades por su aporte para expulsar líquidos, por su hidratación y su capacidad para quemar grasas, ya que aumenta el ritmo de nuestro metabolismo.
Para ello se apoya de todas las ventajas del aloe vera, junto con las del jengibre, un poderoso antiinflamatorio, que precisamente por ello es tan efectivo contra la hinchazón abdominal.
Esta infusión, que puedes comprar o preparar directamente en casa con gel de aloe vera, se hace de forma muy sencilla.
Si utilizas tu propia planta de aloe, antes ten en cuenta que debes lavar bien la pulpa del interior de la hoja. Es importante retirar toda la aloína, una sustancia amarga y amarilla, que está presente entre la pulpa y la piel y que, además de un efecto laxante, también puede ser tóxica si se consume en grandes cantidades.
Con todo listo, ya puedes preparar tu infusión echando el jengibre y el aloe cuando el agua esté hirviendo. Espera unos 15 minutos a fuego lento, luego apágalo y deja que pasen otros 10 minutos más. Por último, cuela el líquido y disfruta de tu infusión en tu taza preferida.