La celulitis es un problema que afecta a mucha gente. Pese a lo que se piensa, no es una consecuencia exclusiva del sobrepeso, sino que puede venir motivada por muchos más factores.
Lo importante, obviamente, es
eliminar la celulitis, dado que además de los inconvenientes estéticos, también puede
afectar de alguna manera a nuestra salud, sobre todo
dependiendo del tipo o grado de celulitis que nos afecte.
Y es que no hay una sola celulitis, sino que su presencia puede ser asociada a diferentes tipologías y, por tanto, debe afrontarse con tratamientos distintos.
Tipos y grados de celulitis
A continuación te detallamos las características de cada tipo de celulitis y cómo puede afectar a tu piel cada uno de ellos.
Celulitis Edematosa
Se trata de un tipo de celulitis que suele afectar sobre todo a mujeres de 20 a 40 años. Los dos factores que más promueven su aparición son una circulación sanguínea deficiente y una considerable retención de líquidos.
El problema de este tipo de celulitis es que no se limita a presentar la típica "piel de naranja", sino que además provoca enrojecimiento de la zona e incluso una sensación esponjosa. A menudo también se siente dolor cuando se tocan los edemas provocados.
Muslos, rodillas y piernas son las zonas más afectadas por la celulitis edematosa, pero lo positivo es que es bastante fácil de tratar, con una combinación de dieta saludable, ejercicio y aliados naturales.
Celulitis blanda
La celulitis blanda puede afectar a cualquier persona, aunque se suele ver con mayor frecuencia en mujeres que tienen entre 40 y 50 años.
Su aparición se caracteriza por una flacidez considerable, sobre todo en la zona de los muslos y de los glúteos.
Es un tipo de celulitis que sí suele estar relacionada con el sobrepeso, ya que se debe a falta de tono muscular, aunque también puede derivar por el paso del tiempo y el envejecimiento de la piel o por cambios hormonales.
Sin un cambio en los hábitos, la celulitis blanda puede ir agravándose conforme pasan los años y no la tratamos correctamente.
Celulitis dura
Este tipo de celulitis puede afectar tanto a personas con sobrepeso como también a personas delgadas, aunque los malos hábitos alimentarios y de ejercicio sí pueden agravarla.
Presenta los característicos hoyuelos en la piel. Es una celulitis compacta que no se mueve. La piel se adhiere al músculo, se endurece e incluso puede presentar cierta sensibilidad o hasta dolor.
La celulitis dura suele afectar sobre todo a las zonas corporales de las caderas, los muslos, las nalgas y la rodilla.
Celulitis extrema
En algunas clasificaciones de tipos de celulitis, este caso suele asociarse a una celulitis dura severa.
Se trata de la celulitis que se ha endurecido de una forma muy consistente y que motiva la aparición de nódulos de grasa, que pueden ser bastante dolorosos.
Además de todos estos síntomas, la celulitis extrema también presenta estrías en la piel, afectando estéticamente a quien la padece.
¿Qué tratamientos hay para cada grado de celulitis?
La celulitis es un problema muy generalizado, pero su tratamiento debe personalizarse lo máximo posible.
Muchos casos de celulitis están relacionados con el sobrepeso o, como mínimo, con el sedentarismo tan extendido hoy en día.
Una dieta saludable y ejercicio físico regular son dos factores que deberían acogerse siempre por los beneficios que ofrecen, pero sobre todo porque representan la base sobre la que apoyarse para actuar contra la celulitis.
Además, te recomendamos sumar a tu cuidado diario la
crema corporal de aloe, con la que vas a
mejorar el aspecto externo de la piel, sobre todo por su aporte a la hidratación cutánea. Además, incluye jugo de aloe vera que es calmante, hidratante y regenerador celular.
De forma más específica para el problema de la celulitis, te aconsejamos aprovechar las propiedades del
gel anticelulítico con aloe vera natural.
Tiene un efecto lipolítico que elimina los cúmulos de grasa y otro efecto venotónico, para actuar sobre los fallos microcirculatorios, sobre todo si tienes la piel muy sensible o dolorida.
Su gran eficacia se basa en la combinación de ingredientes activos como aloe vera, activos lipolíticos y activos venotónicos, pero también por sus liposomas multivesiculares, que son en realidad activos anticelulíticos, así como por su GHK, que es un capturador de subproductos de la peroxidación lipídica.
Los productos naturales apropiados, una dieta baja en grasas y dulces, así como algo de ejercicio con más o menos constancia, te permitirán reducir el riesgo de padecer celulitis o incluso te ayudarán a combatirla.