El aceite de argán, al que se le conoce también por el nombre de “oro líquido”, es uno de los mejores productos naturales que puedes aprovechar para el cuidado de la piel de tu rostro y del cuerpo en general.
Gracias a su alto contenido en ácidos grasos, vitamina E y otros nutrientes, el aceite extraído del árbol de Argán resulta ser un cosmético natural muy versátil con múltiples beneficios para la salud.
El aceite de argán es extraído de los granos del fruto del árbol de argán, que solo podemos encontrar en Marruecos.
Su exclusividad motivó a la UNESCO considerarlos como Patrimonio de la Humanidad y todas sus zonas de cultivo han sido declaradas “reservas de la biosfera”.
Por tanto, es un producto de producción limitada, pero es que su amplia variedad de propiedades para el cuidado de piel lo hacen todavía más importante.
El aceite de argán natural destaca entre sus componentes por una gran cantidad de antioxidantes, así como también por la presencia de vitamina E y vitamina A. La combinación de estos elementos lo presentan como un producto natural importantísimo para los siguientes objetivos:
El elevado porcentaje de antioxidantes presentes en el aceite de argán es una de sus mayores cualidades. Gracias a él, tiene una gran capacidad regeneradora. Es un tratamiento idóneo para eliminar las cicatrices, como las causadas por el acné. Además, es apto para todo tipo de pieles, incluso las grasas.
De hecho, es muy recomendable para pieles secas. Las personas con este tipo de piel suelen sufrir problemas asociados como picores e irritación. El aceite de argán cuenta con ácidos grasos y vitamina E que reparan la piel dañada y le aportan la nutrición que necesita, lo que impide que la piel esté siempre seca.
La combinación de antioxidantes y vitamina E consigue la fusión perfecta para prevenir el envejecimiento y la aparición de problemas como las estrías. También se usa mucho el aceite de argán para las manchas de la cara o para reducir la presencia de arrugas.
Pero esto no significa que sea un producto exclusivo para personas mayores. Por sus propiedades, el aceite de argán es idóneo incluso para la delicada piel de los bebés. Sus propiedades ayudan a aliviar el ardor, la tirantez y todas las irritaciones que le pudiera causar el pañal.
Este producto es también recomendable para mantener unas uñas perfectas. Si las tienes débiles o quebradizas, con un uso rutinario de aceite de argán conseguirás que recuperen un aspecto saludable y fuerza suficiente como para no romperse fácilmente.
En Aloe Plus Lanzarote tienes a tu disposición diferentes aceites corporales. Entre ellos, el aceite puro de argán viene en un envase muy práctico, que puedes aprovechar a diario.
Lo ideal es aplicar tanto por la mañana como por la noche después de la limpieza y antes del tratamiento facial. Con apenas un par de gotas sobre el rostro, el cuello y el escote, es más que suficiente.
Estas instrucciones son apropiadas para el uso práctico del aceite de argán a diario. Pero si tienes algún problema cutáneo en concreto, como puede ser acné, en lugar de esperar a la limpieza facial, aplica el producto tras la ducha.
Puedes usar unas pocas gotas de aceite de argán tanto en el rostro como en el resto del cuerpo. Hazlo con la piel todavía húmeda.
Para potenciar los efectos regeneradores de este producto en la piel, utiliza el sérum de argán y aloe vera de Aloe Plus Lanzarote. Este concentrado, con efecto tensor e hidratante, estimula los niveles naturales de colágeno y elastina, lo que notarás sobre todo a la hora de recuperar la firmeza del rostro y reducir la presencia de arrugas.