El exfoliante facial es un gel limpiador que cuenta con pequeñas partículas en forma de gránulos, con las que se consigue una limpieza profunda de los poros de la piel.
¿Para qué sirven los exfoliantes faciales?
La acción principal de un exfoliante facial es
retirar las células muertas y la suciedad acumulados durante el transcurso del día por factores como la contaminación del entorno, el propio sudor y similares.
¿Cuándo aplicar el exfoliante facial?
A la hora de aplicar exfoliante facial, lo ideal es hacerlo
1 vez a la semana o incluso cada dos semanas, dado que el tratamiento tiene efectos abrasivos y no es recomendable aplicarlo demasiadas veces. También es importante valorar la tolerancia de la piel, pues cada persona puede aceptar el tratamiento más o menos veces. De igual forma, algunos exfoliantes faciales son más agresivos que otros, por lo que es recomendable ir descubriendo cuál es el más adecuado a cada tipo de piel.
¿Cómo aplicarlo?
Para su aplicación, debe utilizarse con
masajes circulares en distintas zonas del rostro para obtener la eficacia deseada.
Antes y después del proceso debe lavarse la piel con agua tibia.