El ácido kójico en cualquiera de estas presentaciones se aprovecha principalmente para el tratamiento de manchas e imperfecciones en la piel. Se ha ganado su reconocimiento tanto por su efectividad como también por la rapidez de sus resultados.
En un tratamiento rutinario puede hacer efecto en apenas 1 o 2 semanas de aplicación. Se le considera uno de los mejores antimanchas actualmente disponibles, útil tanto en melasmas como pecas, ojeras y cambios de tonalidad similares.
El ácido kójico destaca sobre todo por sus propiedades blanqueadoras contra estas manchas. También es efectivo como tratamiento antiedad por ser un gran antioxidante, capaz de dotar al rostro de un aspecto rejuvenecido.
El ácido kójico también se aprovecha para reducir las marcas de cicatrices, actuando sobre la tonalidad que suelen presentar, lo que las hace menos visibles. Finalmente, también es útil para combatir y prevenir infecciones gracias a sus propiedades antibacterianas.