En Aloe Plus Lanzarote no nos cansaremos nunca de contarte la infinidad de beneficios que tiene el aloe vera, tanto en medicina como en estética. En esta ocasión, queremos destacar las propiedades que tiene la sábila para acabar con los incómodos orzuelos. ¿Quieres saber cómo?
Si te despiertas y
sientes una fuerte molestia en el ojo y ves una extraña protuberancia, lo
sentimos mucho pero tienes un orzuelo. Como sabes, el aloe vera es una planta con
muchísimas propiedades medicinales y, también, es ideal para combatir los
orzuelos.
Un orzuelo es una pequeña inflamación
purulenta que nace en el borde de uno de los párpados. Lo más común es que se
produzca por una infección bacteriana o si el ojo entra en contacto con alguna
sustancia irritante. No obstante, también es posible que surja por un importante
estrés o debido a cambios hormonales.
El primer síntoma
que provoca es una sensación muy molesta al abrir y cerrar el ojo, como si
tuvieras tierra en su interior. Además, puedes sentir escozor y experimentar
lagrimeo e incluso visión borrosa.
Si detectas que
este es el problema que sufres, te recomendamos que utilices jugo de la planta de aloe vera. Esta sustancia tiene
propiedades desinfectantes y antiinflamatorias, entre otras. Por esta razón, el
aloe vera se utiliza con frecuencia para tratar afecciones oculares, como la
vista cansada o inflamaciones.
Para comprobar su
eficacia, tendrás que coger una hoja de aloe vera y cortarla a lo largo. Lo que
necesitas es el gel de su interior, de color transparente y aspecto gelatinoso.
Es importante que lo separes de la savia, líquida y amarillenta, lavándola
hasta que la gelatina abandone el color amarillento.
Deberás aplicar el
gel con una gasa sobre tu párpado, dos veces al día. Después, te aconsejamos
que aclares el ojo con agua de manzanilla o con agua normal previamente
hervida, para garantizar la ausencia de bacterias.
En caso de que te
resulte complicado extraer el gel de la penca, te recomendamos que adquieras un
jugo puro de aloe vera. Se trata
de un jugo natural de cultivo ecológico obtenido directamente del interior de
las hojas de aloe vera. Está procesado en frío y conserva todas las propiedades
de la sábila.
Qué evitar cuando tenemos un orzuelo
Por supuesto,
siempre que realices las curas sobre tu ojo, debes tener las manos desinfectadas con agua y jabón.
Pero al margen de utilizar remedios caseros, debes conocer qué cosas debes
evitar para no empeorar la situación.
Jamás intentes
pinchar el orzuelo. Ten en cuenta que un orzuelo no es una bolsa o un callo, es
una inflamación de alguna de las glándulas sebáceas donde se encuentran las
pestañas. Si tratas de reventarlo, además de que será extremadamente doloroso,
solo conseguirás empeorar la infección.
Te aconsejamos que
no toques el ojo del orzuelo y, sobre todo, no lo frotes. Si lo haces,
aumentará la irritación. En caso de que no puedas evitar tocarlo, lávate las
manos de inmediato, ya que si te tocaras el ojo sano podrías contagiarlo. Te
aconsejamos que utilices el jabón de aloe vera, ya que es un
producto totalmente natural, elaborado a base de aloe vera, aceite de coco,
glicerina y perfume sin alérgenos.
Asimismo, te
advertimos que no debes utilizar medicamentos por tu propia cuenta para curar
el ojo. Si la infección es tan grave que no te funcionan los remedios
naturales, como el aloe vera o la manzanilla, debes acudir de inmediato a tu
centro de salud. Tiene que ser siempre un profesional quien te prescriba un
medicamento.
Tipos de orzuelo
Esta infección
produce un dolor bastante molesto y puede aparecer en la parte exterior o
interior del párpado.
Un orzuelo externo presenta una protuberancia
enrojecida con un punto de pus, de color blanco o amarillento y se localiza en
el borde del párpado. Son más fáciles de curar que los internos y los remedios
caseros son bastante efectivos para hacerlos desaparecer.
Por
su parte, el orzuelo interno también
se asemeja a un forúnculo. Como imaginarás, aparece en el interior del párpado,
por lo que es más complicado curarlo y las opciones naturales no son tan
efectivas. No obstante, te recomendamos intentar aliviar la zona con remedios
naturales antes de recurrir a productos químicos.