El maridaje perfecto entre la uva cultivada en tierra de volcanes y la nota cítrica propia del vino. Es una fragancia marcada por la frescura del té y la dulzura del melocotón, que nos evoca el más puro olor de la tierra.
Esta fragancia es fresca ya que la concentración de esencia está entre un 8% y un 15% . Por lo tanto, son una buena opción para uso diario y para épocas calurosas.